«Hemos construido un sistema que nos persuade para gastar dinero que no tenemos en cosas que no necesitamos para crear impresiones que no durarán en personas que no nos importan»
Emili Henri Gauvreay
Hay personas que consideran la economía como algo ajeno a sus vidas, y no tienen en cuenta que los seres humanos simplemente formamos parte de ella.
La economía es como un tablero de juego en el que hemos edificado la existencia de nuestras sociedades, y en el que a través de lo que conocemos como dinero se relacionan tres jugadores: El sistema monetario, las empresas y los seres humanos.
La economía es la proyección física y material de como pensamos y nos comportamos la mayoría de nosotros en relación al dinero, al valor de las cosas, de nuestra energía vital y de nuestro tiempo. Estos comportamientos han ido últimamente girando hacia nuestros actuales hábitos de consumo que están estrechamente relacionados con el crecimiento económico y su impacto medioambiental.
La naturaleza no tiene derechos. Las necesidades económicas del ser humano están siempre por encima de las necesidades del planeta que habitamos. La propiedad privada, el mercantilismo y otros fines lucrativos son el motivo principal de la destrucción devastadora que el ser humano realiza a nuestro bien natural más preciado.
Además, el crecimiento de la población de seres humanos está siendo de un 50% cada 25 años, de modo que en el año 2025 se espera que pueblen el planeta unos 9000 millones de personas, cuando en el año 1800 sólo éramos 900 millones, de los cuales sólo un 3% era población urbana. Si nuestros hábitos de consumo siguen igual y la población sigue creciendo, ¿se te ocurre alguna razón para no pensar en nuestra insostenibilidad como especie sobre el planeta?
Y mientras seguimos asfaltando y urbanizando la naturaleza, la economía va devorando poco a poco el planeta en el que vivimos. Vilaseca ve a la economía como un subsistema menor en expansión dentro de un sistema mayor que es finito. En algún momento, este sistema mayor finito no podrá soportar el tamaño devastador del subsistema interno en constante y exponencial crecimiento. El desarrollo material infinito que promueve el capitalismo radical en el que vivimos es insostenible, ya que en el presente, los seres humanos consumimos los recursos naturales correspondientes a 1,4 planetas Tierra. Ahí es nada.
Si la economía está devorando poco poco nuestro planeta, ¿crees que el crecimiento económico debe ser la razón de ser de nuestras sociedades desarrolladas? ¿No estaremos planteando mal esto que llamamos vida? ¿Qué soluciones se te ocurren? ¿Ves tan grave la situación o crees que Vilaseca exagera con el tema?
Entradas de la serie:
Esta claro que las materias primas no son infinitas, por tanto algun día tendremos que cambiar nuestra forma de entender la vida, quizás esto será dentro de 200 años, quien sabe… pero en terminos generales no creo que vayamos por buen camino.
Si al final lo que se ve en películas será verdad, nos iremos a otro planeta a consumirlo! jejeje.
Saludos!
Sergio A.
Efectivamente, el sistema está pensado para que gastemos lo que no tenemos, ya que el ahorro está penalizado con la inflación y los impuestos. El papel moneda está viciado, ya que no está respaldado por activos reales. Se producen expansiones crediticias que no están respaldadas por ahorro real.
El capitalismo se basa en el ahorro, no en el consumo. El dinero que genera la economía real y se ahorra, se vuelve a invertir.
Pero nuestro sistema actual no es capitalista. Se imprime dinero para salvar las malas inversiones (¿es esto capitalismo?) a costa de devaluar una moneda que la clase media ha ahorrado honestamente.
El mercado más importante (el del dinero, fijado por los tipos de interés), está intervenido por los políticos y banqueros, generando burbujas crediticias que desembocan en crisis como la actual, ¿es esto capitalismo?
No se puede decir aun señor con cáncer de pulmón que no fuma, que su enfermedad se debe a los 3 paquetes de tabaco diarios que se mete. La mayoría de la gente tiene una imágen negativa distorsionada del capitalismo, lo cual es aprovechado por los burócratas de izquierda y derecha para apretarnos todavía más.
La propiedad privada es un derecho fundamental de todo ser humano. No entiendo por qué lo asocian a la destrucción del medio ambiente. ¿Acaso la Unión Soviética era un estado ecologista? ¿La solución pasa porque el estado nos robe lo que nos pertenece y unos pocos señores decidan cómo se gasta con la excusa de salvar el planeta?
Actualmente el estado se queda con la mitad del coste salarial de un mileurista. ¿Todavía nos quieren sacar más? Es ridículo.
Sobre la insostenibilidad del crecimiento económico, se puede crecer mejorando la productividad. Hace 25 años un ordenador personal costaba más del doble que ahora, sin embargo su rendimiento ha mejorado de forma exponencial. Consumen menos energía y su coste de producción es mucho menor. Un ejemplo de cómo la tecnología ha hecho que la producción de un bien sea más eficiente, haciendo que las empresas crezcan económicamente utilizando menos recursos.
Eso sí, todavía hay energúmenos que nos quieren vender que hay que volver a las cavernas y ya de paso quitarnos lo que nos pertenece, lo que ganamos con nuestro trabajo (aparte de lo que ya nos quitan).
Pretenden socavar los derechos individuales a cambio de salvaguardar supuestos derechos colectivos que ellos determinan.
Os dejo con una frase de Hayek: «La propiedad privada es la mayor garantía de libertad».
No hay que olvidar el factor tecnológico, que hace que para una unidad de producción cada vez se consuma menos energía y se contamine menos. La industria del principio del capitalismo era infinitamente menos eficiente e infinitamente más agresiva con el medio ambiente que la de hoy día. Si no hubiera sido así, hace ya muchas décadas que el sistema se hubiera colapsado.
También, la población mundial crece, pero cada vez más despacio, pues los países emergentes empiezan a controlar su natalidad; dentro de no mucho tiempo puede que consigamos una población mundial estable.
Estos hechos, si se juntan con una conciencia ecológica y una firme voluntad por hacer un sistema sostenible, como sucede en los países más avanzados de Europa, pueden hacer que el sistema económico pueda seguir tirando algun siglo más… quizá.
No olvidemos que las proyecciones de futuro se basan en que todo siga igual que ahora, pero es que las cosas nunca siguen igual, todo cambia constantemente. Predecir el futuro nunca ha sido fácil. El sistema se adaptará para poder sobrevivir, porque no hay otra opción.
@Jorge
El sistema actual es capitalista, lo mires como lo mires. El capitalismo se basa en la propiedad privada de los medios de producción. Creo que esa propiedad privada es muy responsable de esa pretensión de crecer y crecer, porque cuando pensamos como individuos no somos capaces de ver el mundo como un conjunto. Individualmente, quiero ver crecer mi patrimonio; pero no advierto que si todos los individuos hacen eso, llega un punto en que estamos exigiendo demasiado al planeta. El hombre como especie no es una agrupación de individuos, nos hemos dado una organización social como forma de progresar. Por este motivo, todos dependemos de todos y tenemos que tenerlo en cuenta para organizar nuestra economía.
Por otra parte, la intervención de unos pocos sobre mercados y estados es inherente al capitalismo también. El capitalismo tiende a la concentración de capital (piensa en el monopoly) y, en parte, es por eso por lo que hay que imprimir dinero de forma continua (hay que diluir el capital concentrado). La concentración de capital nos lleva también a la concentración de poder, que es el que luego permite manipular los mercados. El hombre no sólo es economía, aspira al poder y por este motivo, no es posible esa «ideal» economía de mercado. Siempre va a haber alguien que intervenga en ella.
El derecho a la propiedad privada como algo fundamental es muy discutible. Yo no pienso que me pertenezca un trocito de planeta, pienso que el planeta le «pertenece» a la humanidad en su conjunto (entrecomillo porque hay más vida aparte del hombre). Existen y han existido sociedades sin propiedad privada, eso ya nos debería dar que pensar.
De todas forma, sin entrar en temas tan metafísicos. ¿Por qué ese derecho no se cuestiona nunca? En España, hoy se cuestionan derechos como la sanidad, la educación o el trabajo digno. ¿Por qué éstos sí que pueden cuestionarse y no el otro? No lo sé, pero veo que el derecho a la propiedad afecta a los ricos (y no se cuestiona); y los otros, afectan a los pobres (y sí se cuestionan).
Por último, yo también tengo una visión optimista del hombre, y espero que su ingenio sea capaz de evitar una crisis malthusiana. Pero no puedo confiar en esa capacidad de invención de forma indefinida, por el simple hecho de que el crecimiento infinito no es posible en un planeta finito. Podemos ser muy productivos y eficientes, pero existen límites físicos con los que yo no quiero encontrarme.
Un saludo.
@Jose
Tampoco hay que olvidar es la ley de rendimientos decrecientes.
En cuanto a la población, te informo de que su crecimiento es geométrico y muy difícil de frenar. Con la inercia que llevamos, llegaremos a los 10000 millones sin darnos cuenta.
China e India han seguido políticas de control muy coercitivas. Me viene bien esto para preguntar, ¿qué os parece que el estado os diga cuántos hijos puedes o no puedes tener? ¿No va esto contra la libertad individual?
@devuntu
Te voy a dar parte de la razón y voy a admitir que el sistema es parcialmente capitalista y que hay relativa libertad económica. Pero sólo relativa.
Un sistema donde más de la mitad de la riqueza pasa por el estado no puede calificarse de «capitalismo puro» o «capitalismo salvaje» como lo califican algunos. Si eres asalariado, mira cuánto paga tu empresa en cotizaciones a la Seguridad Social, mira lo que pagas tú a la Seguridad Social, mira el IRPF. Luego piensa que la mitad de lo que pagas cada vez que echas gasolina son impuestos. Y que todo lo que compras tiene un 18% de IVA. Piensa en lo que pagas de IBI, impuesto de circulación, por bebidas alcohólicas … La mitad o más de la riqueza que generas va a las arcas públicas.
Está claro que somos parte de una sociedad, pero eso no significa que los que ostentan el poder tengan derecho a organizar y planificar la economía, a expropiarnos y a pisotear los derechos del individuo como la propiedad privada.
Existen aspectos en la economía actual que no tienen nada que ver con el capitalismo ni el libre mercado:
* Tipos de interés intervenidos: la oferta y demanda de dinero prestado está manipulada. Tipos artifialmente bajos durante décadas han propiciado la mayor expansión crediticia de la historia. Políticos y banqueros centrales han intervenido este mercado propiciando alteraciones violentas en los ciclos económicos como la crisis actual.
* Creación indiscriminada de dinero fiduciario sin una base de activos reales: esto ha servido para monetizar la deuda mastodóntica de los estados, los cuales han seguido emitiéndola (endeudando a futuras generaciones), y timando a la clase media ahorradora, que ha ido viendo cómo sus ahorros valen cada vez menos debido a la inflación. Es muy fácil seguir endeudándose cuando se trata del dinero de los demás, pero claro, hay que seguir manteniendo el chiringuito de privilegios y poder.
La propiedad privada es un derecho fundamental. El fruto de mi trabajo me pertenece. Yo no poseo un trozo de planeta, yo he generado una riquieza y me llevo mi parte, mediante la firma de un contrato voluntario. Y si no, ¿quién se la queda? ¿el estado? Los políticos se caracterizan por realizar inversiones equivocadas, despilfarrar y abusar del poder.
Lo tengo claro: donde mejor está el dinero es en el bolsillo de los ciudadanos.
Los derechos más socavados y cuestionados son los de la clase media. Los ricos se las apañan para pagar lo mínimo. Para los pobres el estado reserva unas migajas subvencionándolos, sin dejarles levantar el vuelo por sí mismos, dándoles pan, circo y subvenciones, y la clase media paga todo el chiringuito.
Os dejo con una frase de Winston Churchill, no es exactamente así, la cito de memoria:
«El problema del capitalismo es el reparto desigual de la riqueza. El beneficio del socialismo es el reparto equitativo de la pobreza».
El libre mercado es un sistema flexible. Será lo que nosotros queramos que sea.
@Jorge
El dinero es creado por manos privadas, no es el estado ni ningún ente público el que lo hace. Ahí tienes un ejemplo de cómo el que tiene poder interviene en la economía.
Hay una frase de un banquero famoso que reza:
«Dadme el control del suministro de dinero de una nación y no me importará quién haga sus leyes».
Te doy la razón en que el estado pega una buena mordida a tus ingresos, lo veo todos los días. Pero se te olvida algo: el estado es algo creado por las elites de poderosos. Son estas elites las que controlan la producción y el poder, el estado es uno de sus instrumentos. Fíjate cómo es el estado el que protege con sus leyes, su justicia y su policía el derecho de propiedad privada. ¿Crees que sin estado duraría mucho la propiedad individual?
Yo creo que no, y pienso que es incoherente estar a favor del capitalismo, pero en contra del estado. Una cosa no es posible sin la otra. Hago notar que el estado no es posible sin un sistema que tenga algo de capitalismo, porque es necesario producir excedentes que sustenten burocracia y servicios. El capitalismo es el encargado de hacerlo, al menos actualmente. Así que no hay que tratarlos como cosas contrapuestas; muy al contrario, son complementarias.
Si consideras el trabajo como mercancía, te admito que tu trabajo te pertenece. Sin embargo, tu trabajo también puede beneficiar a otras personas y tú no reclamar nada a cambio. Un ejemplo es el trabajo de las amas de casa: no contabilizable monetariamente, pero presente.
El meollo de la cuestión es que el capitalismo empuja a la producción de excedente. Luego, tú produces lo que necesitas y algo más. ¿Para quién es ese excedente? Pues sin duda para el dueño de los medios de producción, y para el que protege su propiedad: el estado. Después el estado mantiene la paz social con el pan y el circo, estamos de acuerdo.
Lo que trato de decir es que el capitalismo sin estado no es posible. Si una parte importante de la economía pasa por el estado, es porque interesa que así sea. El estado sólo es un instrumento del poderoso, y la coerción que puede ejercerse a través de él es incomparable a cualquier otra que pudiera hacerse de manera individual.
@devuntu
Efectivamente, el suministro de dinero debería ir en consonancia con la generación real de riqueza, y ésta debería de crearse por las empresas. Otra cosa es que esto se organice en el banco central, pero si lo piensas, tampoco tendría por qué ser así. La banca central es un monopolio estatal. ¿Acaso la FED, el BCE o en su momento el Banco de España, no son organismos públicos controlados por políticos?
Quede claro que estoy a favor del estado, siempre que éste sea democrático y tenga un poder limitado y no juegue el rol de planificador central de la economía (y ésto incluye los tipos de interés).
Los ciudadanos suscriben contratos libre y voluntariamente, y existe una justicia en la que ampararse en caso de incumplimiento de los mismos. Éste servicio de justicia puede estar prestado por el estado.
El poder político hay que limitarlo. Un instrumento es la separación de poderes (la de verdad, no la nuestra). El que ostenta el poder tiende al abuso del mismo y por eso hay que limitarlo. Debemos partir de una concepción pesimista de la naturaleza humana, en el sentido de que el ser humano tiende al abuso y a la extralimitación, de ahí que se establezcan estos mecanismos.
El extremo opuesto es un estado que controla todos los medios de producción nacionalizando las empresas, y ya de paso eliminando completamente la libertad de sus ciudadanos para suscribir contratos voluntarios con las mismas. El estado dirá dónde y por cuánto trabaja cada persona. Ahí tenemos un sistema comunista.
La parte de riqueza que yo produzco y me pertenece vendrá fijada por el contrato que he firmado libremente, por ejemplo para trabajar para un empresario. El excedente producido será para el empresario, ya que él ha tenido una idea, se ha jugado su dinero al invertir en ella y la ha puesto en práctica, lo que también le ha supuesto tener que realizar un trabajo y asumir un riesgo. Por eso es bueno que obtenga una recompensa. Quien no entienda ésto es presa de las viejas ideas marxistas, trasnochadas y caducas.
Además, la clase media se puede convertir en capitalista, es decir, en propietaria de las empresas. Ésto puede conseguirse con grandes inventos como la bolsa o los fondos de inversión. Ésta clase media puede ser libre e independiente financieramente, sin necesidad de subsidios del estado. Por eso los pseudomarxistas que odian la libertad reniegan de todo lo que huela a bolsa, a pensiones privadas y, en definitiva, a todo lo que impliquie libertad e independencia financiera del individuo.
Otra cosa es que yo decida libre y voluntariamente donar parte de mi riquieza a alguien que lo necesite, pero seré yo quien lo decida. Que el estado nos lo quite para hacerlo no es justo, y además éste lo hará de forma ineficiente, y eso sin contar con lo que se irá perdiendo en la burocracia y las manos de los que ostentan el poder.
Estamos de acuerdo en que la coerción que se puede ejercer a través del estado es incomparable a cualquier otra. Por eso insisto en que el poder del estado debe ser limitado, y la riqueza debe estar en manos de la sociedad civil.
Hablas de poderosos que controlan medios de producción. Desde luego siempre los habrá. No obstante te recuerdo que la clase media también puede convertirse en capitalista, esto es muy importante. El estado debe nutrirse de leyes que aseguren la libre competencia. Pero el primero que debe respetar esa libre competencia es el propio estado. Las pensiones públicas: ahí tienes un monopolio del estado, y encima es un sistema insostenible al borde constante del colapso, un sistema piramidal que de ser ejecutado por una empresa privada, terminaría con sus responsables en la cárcel. No se puede permitir al estado cometer delitos que no se permitirían a los individuos.
Lo dicho: democracia libertaria, estado mínimo con poder limitado, libertad de contratos, mecanismos de control y limitación del poder. Ésta es la garantía de prosperidad, al menos para la mayoría de la gente. El marxismo trae reparto de migajas y pobreza, opresión y totalitarismo.
Tengo serias dudas al respecto.
Que el mundo es finito?¿quien lo ha dicho?¿es él constructor del mundo?
Creo sinceramente en la expansión ilimitada de la persona y del mundo que nos acoge generosamente.
Quiero pensar que contamos con suficiente inteligencia y confio en que lo podamos utilizar para nuestra expansión ilimitada e indefinida.
No siempre las ideas correctas y acertadas han sido las defendidas por la humanidad , pero antes de llegar al precipicio el hombre ha sabido reaccionar.
Para todos los que no crean en el hombre y el mundo en que vivimos les recomiendo se den de alta en la asociación de defensores de que la tierra es plana.